LA HISTORIA DE LA SALVACIÓN ACTIVIDAD REFLEXIVA Parábola: ¿A quién rescato? Un hombre junto con su hijo y un amigo de su hijo estaban navegando en un velero a lo largo de la costa del Pacífico, cuando una tormenta les impidió volver a tierra firme. Las olas se encresparon a tal grado que el padre, a pesar de ser un marinero de experiencia, no pudo mantener a flote la embarcación, y las aguas del océano arrastraron a los tres. El padre logró agarrar una soga, pero luego tuvo que tomar la decisión más terrible de su vida: escoger a cuál de los dos muchachos tirarle el otro extremo de la soga. Tuvo sólo escasos segundos para decidirse. El padre sabía que su hijo era un buen cristiano, y también sabía que el amigo de su hijo no lo era. La agonía de su decisión fue mucho mayor que los embates de las olas. Miró en dirección a su hijo y le gritó: ¡TE QUIERO, HIJO MIO! Y le tiró la soga al amigo de su hijo. En el tiempo que le tomó al amigo halar hasta el velero volcado